Hace ya más de un año estuve dando clases particulares de inglés, fue iniciativa de una amiga que me pidió que les diera clases a sus hijas. Yo nunca había el nivel o las aptitudes para hacerlo pero decidí intentarlo y me apliqué a la tarea con gran entusiasmo (algunas de las actividades incluso las comenté por aquí), luego no pude seguir porque los horarios ya no lo permitieron, pero me quedó la semillita. Así que busqué cursos para prepararme como maestra de inglés y encontré uno intensivo de verano en el Anglo, averigüé ahorré el dinero y planeé qué podría hace mi hijo en esas horas, pero justo en el último momento quien iba a ayudarme para que se pudiera hacer realidad decidió no hacerlo y no pude tomar el curso. Fue frustrante y me sentí triste, pero ni modo.
Este año, conforme se acercaba el verano de nuevo, investigué y descubrí que podía pedir una beca para el curso siempre y cuando fuera alumna del Anglo así que me inscribí, hice un par de cursos que disfruté mucho, y seguí el proceso de concurso para la beca, fue pasando paso por paso, hasta llegar al último, en que finalmente me rechazaron. Esta vez había planeado también actividades para mi hijo, así que de nuevo me desilusioné, me entristecí, pero decidí tomar levantarme y seguir adelante. Supongo que es una lección de la adultez pero más de la maternidad, a veces tienes que esperar año tras año para poder hacer realidad metas profesionales como mamá, porque debes ponerle pausa a tu desarrollo para atender situaciones más inmediatas de los hijos.
Después de unas vacaciones extraordinarias, regresé y decidí tomar el curso de primaria aunque hubiera que pagarlo, con la expectativa de desquitar el gasto consiguiendo un trabajo inmediatamente para el siguiente años escolar que comienza en agosto.
Y aquí estoy aprendiendo mucho, en un grupo muy variado, con una maestra y algunas compañera muy experimentadas en la enseñanza, a veces muy entusiasmada, otras un poco aterrorizada de enfrentarme a un grupo de niños de primaria en apenas unas cuantas semanas, pero en todo caso tratando de construir un futuro, un camino, una aventura.