lunes, marzo 04, 2019

Nuevas cosas, nuevas dificultades, soluciones

Mañana tengo clase de violín con una nueva maestra, estoy nerviosa, me la recomendaron y ha de ser muy buena gente, pero siempre tengo miedo.

No estoy muy segura de que me pasó en la infancia en la escuela de música a la que asistí de los 4 a los 8 años, pero es posible que haya vivido experiencias desagradables porque me quedó un terror arraigado por los maestros de música, algo que ni me puedo explicar, pero que al conocer de nuevo a los diferentes maestros de música en la infancia de mi hijo y luego en mi propia escuela, veo que más de la mitad tratan mal a los alumnos haciéndolos sentir mal acerca de si mismos, generando muchos traumas, seguro que es aún peor si fue en la primera infancia. Otras disciplinas artísticas tampoco se quedan atrás, por cierto.

El 3 de octubre del 2018 iniciamos con el grupo de música y violín para bebés, ha sido maravilloso, los niños tienen una gran capacidad y pareciera que no hay tema o habilidad que no se les pueda enseñar, esto me ha hecho tomarme más en serio mi propio aprendizaje y claro, he creado mucho material didáctico para ellos.


La situación de la Ciudad de México ha ido empeorando en cuanto a la seguridad y es muy agotador ir por las calles y el transporte público siempre alerta y listos para luchar.

Estoy muy contenta siendo maestra, es mi mero mole. ojalá que esto les deje algo lindo a los niños y sus mamás, creo que son el binomio más importante para el desarrollo infantil. Pienso que reforzar ese vínculo y mejorar la confianza que las mamás tienen en si mismas es la clave para un desarrollo emocional sano, que es la base de todos los demás aprendizajes y habilidades del niño.

Mi mayor problema es encontrar tiempo para estudiar en medio de las obligaciones del hogar. La última semana mi hijo estuvo con tos, primero se puso bastante mal y ahora, 8 días después aún sigue con tos, aunque ya se va recuperando, pasamos casi toda la semana encerrados y aunque no  logré estudiar como esperaba, pudimos hacer otras cosas como rockear juntos, ahora que ya tenemos un bajo y una guitarra eléctrica. Es muy emocionante y nos regresa a ese ritmo de la escuela en casa, que nos hace felices y nos permite concentrarnos en estudiar.

Extraño las interacciones que se daban cuando escribía más a menudo por acá en lugar de compartir cachitos en fb o Instragram, todas estamos tan ocupadas ahora que estamos aisladas y eso hace más difícil  la maternidad y la vida, siento.

Trataré de volver a escribir por acá con alguna frecuencia.