Literalmente los hice con un tenedor y en este último experimento ni siquiera usé polvo de hornear ni colador para la harina.
El de la derecha es el de moras, y los otros dos son de tofu con chocolate (de agua de Oaxaca), tienen mantequilla y azúcar, sólo que el de la izquierda tiene huevos y el otro no, que interesante cómo eso cambió todo.
1 comentario:
Uhhhhhhhhhhh! ¡Se ven bien! Seguro ahora ya no quedan ni las moronas ¿verdad? Suena exótico eso de tofu con chocolate... y bueno... como siempre tuve miedo de los hornos y sigo teniéndolo... lo único a lo que aspiro por el momento es a saborearme tus exprimentos reinazazazaza... ¿Cómo estás? Tuve que poner moderación en los comentarios de mi blog porque me empezó a llegar spam a una entrada y ya estaba hasta el gorro. Gracias por visitarme tanto y dejárme saber que estuviste en casita virtual. Te amo locamente, es que es más que simple querencia y no hay en español otra palabra para expresar brevemente la intensidad afectiva que siento por tí... estoy un poco triste... pero estaremos bien... ¡besos!
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