Esta semana me he dedicado a un par de calcetincitos de bebé para un regalo (que mandaré a una bloguera) y sigo con las pantuflas del Itzcóatl, de hecho acabo de terminar ambos, unas horas después de la foto.
Por cierto, le mostré la madeja blanca a mi madre, que la había tenido hace más de 20 años y me la pasó hace unos 3, y la reconoció, y dijo que no era acrílica y luego le hizo "la prueba", que consiste en quemar un pedacito, si se achicharra y se pone duro es porque tiene plástico, si se deshace como polvo, entonces es orgánico, además el olor es también característico, y sí olía como cabello quemado, con lo cual queda probado que es una fibra natural, ¡estoy feliz!
De leer sólo los manuales de Calvert para agarrarle la onda a la escuela en casa y el sistema, ya les estaré contando con más detalle mañana.
1 comentario:
Ardo en deseos de conocer los comentarios que tienes sobre los manuales de Calvert.
Los calcetines son preciosos, por cierto, y el secreto para saber cuándo un hilo es orgánico me encanta.
;)
Gracias.
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