Desde que tomé el curso de
Ciclo Femenino y Fertilidad Consciente, impartido por el colectivo de
Yeztli, he estado prestando mucha atención a mi ciclo.
Ojalá hubiera sabido sobre todo esto antes, hemos aprendido de los medios a no querer nuestro ciclo y verlo com una calamidad, que hay que ocultar e ignorar, y cuánto daño y sentimientos encontrados se generan aún sin darnos cuenta al tratar de mantener un temperamento plano y constante, en lugar de cambiante, porque ésta característica se relaciona negativamente con la femenidad, con inestabilidad, irritabilidad e incapacidad de asumir compromisos profesionales.
El curso me abrió los ojos a la posibilidad de considerar nuestro ciclo como una oportunidad de reiniciar cada vez, de llevar a cabo las ideas gestadas durante las semanas anteriores, de ser reflexiva, de conectarme, de deshacerme de lo que me sobra, dejar irse esas cosas que me hacen daño y que con tanto cuidado tenía guardadas y acomododaditas en el ropero del alma.
Aunque desde muy chica había tomado registro de mi periódo, pero sólo anotando el primer día de la regla y su duración, aunque esto me brindó información útil sobre la que ahora relfexiono, como que al principio mi regla duraba 7 días y luego de tomar pastillas anticonceptivas se redujo a 3, y que eso pudiera no ser muy positivo o natural; no fue sino hasta que aprendí a determinar el día de la ovulación con cierta presición (gracias al curso) que empecé a saber mucho más de mí y ver, por ejemplo la relación entre las lunas y nuestro periodo. En el calendario lunar de la foto, las lunas anaranjadas son el primer día de la regla, no hay ningún patrón ahí, pero cuando incorporé las ovulaciones noté algo muy interesante. En junio tuve un ciclo partcularmente largo, duró 34 días (justo es el que está en la foto del registro), y parece que tuvo que ver con un ajuste en el que me alineé con la luna de otra manera, como se ve en las lunas azules del calendario lunar.
Con ayuda de las observaciones del libro (
Ciclos Femeninios y Fertilidad Consciente, guía de observación y registro del ciclo fértil), he podido determinar con gran precisión mis días fértiles y usar esto como guía de planificación familiar sin ningún otro medio, que de todos modos no usaba hacía 10 años, como pastillas, parches, inyecciones o DIU pues sé que son dañinos; a pesar de que mis ciclos sean de diferentes duración.
Diciembre 2009 30 días, día de ovulación 13 de mi periodo.
Enero, 29 días, día de ovulación 10 de mi periodo.
Febrero 27 días, día de ovulación 13 de mi periodo.
Marzo 26 días, día de ovulación 15 de mi periodo.
Abril 27 días, día de ovulación 12 de mi periodo.
Mayo 29 días, día de ovulación 12 de mi periodo.
Junio 34 días, día de ovulación 13 de mi periodo.
Julio 30 días, día de ovulación 11 de mi periodo.
Agosto 30 días, día de ovulación 13 de mi periodo.
También he podido identificar los diferentes humores y vivirlos intensamente en lugar de negármelos aprovecharlos y disfrutarlos, como la hipersensibilidad emocional de los días de antes del periódo, o el mucho frío que acompaña la ovulación, o el ánimo de limpiar y ordenar sin parar antes de la ovulación, pero principalmente la manera en que estoy presente y conectada con las sensaciones durante los días de sangrado, especialmente los primeros, y así como apenas unos días antes anduve desesperada y enojona; en éstos días soy capaz de estar más cerca de mi hijo, sin necesidad de palabras, simplemente estamos conectados.
Hace un año no tenía idea de todo esto que soy y que me pasa, ojalá lo hubiera sabido antes. ¿y ustedes (hombres y mujeres) cómo perciben el ciclo?