A veces quisiera ser de nuevo posibilidad.
Cuando era una niña era lista, no creo que nunca nadie haya temido que era genio, pero era considerada lista por los adultos, especialmente por mis padres.
Pronto mi madre tuvo mayores preocupaciones que las de alabar mi inteligencia.
Para mi papá duró por ahí de cuando cumpliera 15 años, después fui en caída libre.
Aún durante los últimos años que viví en Costa Rica (de los 15 a los 18) creo que se creía que yo sería capaz de hacer grandes cosas. Cuando comencé a ir a la Universidad mis padres aún medio lo creían, mis profesores lo pensaban, pensaban que podía hacer algo importante.
Sólo que el rango de las cosas que consideran importantes es muy distinto de lo que yo considero importante, y esos criterios entrando en conflicto me hacen profundo daño. Me corroen y agotan, quiero salir corriendo, y volver a ser posibilidad y no conclusión fallida a sus ojos, a muchos otros ojos.
Triste.
1 comentario:
Y si supieran aquellos que te hacen sentir triste, que otros como yo hemos conocido otra perspectiva de la vida gracias a ti, que tu tienda , tu estilo de vida, tu valentía y el enorme amor que profesas a tu hijo son una revelación y una inspiración en nuestra vida, tal vez ni tu lo imaginas pero es así, no te amilanes, no entristezcas, recuerda que caminas una vereda que pocos han caminado, que vas abriendo brecha y que muchos vamos siguiendo tus pasos para avanzar en nuestros propios sueños, animo¡¡¡¡¡ :)
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