Mi papá alraga la vida de las prendas mucho, pero mucho mucho.
Así que no resultó extraño cuando me pidió que le volteara el cuello a su camisa de pana (corduroy) que le gusta llevar a los viajes de clima frío.
Con menos experiencia no me habría atrevido, pero ahora me siento más confiada.
Así que la descosí.
Es importante siempre retirar todos los hilitos que quedarn al descoser, pues éstos se pueden atorar en la máquina y hacer un nudo, jalón o manchón de aceite, incluso pueden romper la prenda.
Le hice zigzag en para unir la parte dañada, darle más duración y resistencia.
Coloqué los alfileres y la volví a coser.
Pueden intentarlo con alguna camisa que ya hayan dado por perdida, y también se puede hacer con los puños.
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