El año pasado habíamos asistido por primera vez. Entre los estudiantes de viola había un niño pequeño y también una señora que era su mamá. Eso, aunado a mi deseo de toda la vida de desarrollarme musicalmente así como otras influencias me hicieron decidirme y, pocas semanas después terminé comprándome un violín, sin siquiera pedir consejo pues sentía mucha pena.
Desde que comencé acaricié la idea, entonces lejanísima, de poder inscribirme el siguiente año como estudiante, junto con mi hijo. Y el día esperado llegó al fin. Aún sentía mezcla de orgullo vergüenza al incribirme, pero le experiencia fue maravillosa, más de lo que había imaginado.
Tuvimos clases grupales con las maestras Nicolette Solomon-van Wyk y Carmen Wise; y clases maestras con Scott Conklin.
El primer día de clase maestra estaba nerviosísima y tensa com un palo, pero este profesor es muy amigable y además bueno, me quedó muy clara la idea de interpretar la música, más allá de las dificultades técnicas.
Participar en el concierto final fue hermosisímo así como escuchar a la orquesta.
No puedo esperar a el año próximo y estoy procurando estudiar más para avanzar.
Debo confesar que por primera vez recibí elogios por mi desempeño musical (casi que en toda mi vida), y resultó muy estimulante.
No puedo esperar a el año próximo y estoy procurando estudiar más para avanzar.
Debo confesar que por primera vez recibí elogios por mi desempeño musical (casi que en toda mi vida), y resultó muy estimulante.
1 comentario:
Muchas felicidades Náhuatl!!!!!!!!
Me alegro mucho por ti, que hayas disfrutado algo que amas <3
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